martes, 23 de noviembre de 2004



El humo me ciega momentáneamente, al abrir los ojos encuentro un mundo fantástico, lleno de situaciones caóticas, mezcladas con el aún fresco recuerdo del lugar lleno de calor, cuerpos sudados y música electrónica, el sonido de una sirena en la noche me regresa a casa, lamento el accidente... donde y quien quiera que haya sido. La soledad se vuelve mi cómplice y a ella le dedico mis más sórdidos pensamientos, es tan confiable, que sabe exactamente lo que pasa en mi corazón y mi cerebro...sin censuras, al fin de cuentas, siempre ha estado conmigo...se ha ganado ese derecho.

3 comentarios:

vero dijo...

hola

prof. rulo!!

que onda con su acertijo? bueno, reciba un saludos de mi parte. okis

see you

Raul David dijo...

no te preocupes por entenderlo...creo que solo yo lo haré :)...saludos verito...cuidate

Ana dijo...

se que este blog no es para dar detalles pero indudablemente hay situaciones descritas en el las cuales crean interrogantes y opiniones:

1) probaste algun estupefaciente o algo por el estilo?
2) cuando estamos enajenados, realmente lamentamos lo que le pueda ocurrir a alguien? o es solamente un decir por cortesia?
3) acertadamente: la soledad esta con cada uno de nosotros la mayoria del tiempo y tiene Derecho.

ahora que lo pienso en la medida que nos hacemos concientes de esa soledad nuestra, y asimilamos la soledad del otro, nos podemos comprender y solidarizar.

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